miércoles, febrero 08, 2012

 MURIÓ "EL FLACO" SPINETTA

Dibujo de Spinetta: Fermín
La noche izará su final de gotera
Y el ave aquel lo llevará
Fermín se fue a la vida
No se cuando vendrá.
Aunque no era de sus seguidoras y me pareciera tremendo que le quisiera robar un color a la muchacha  mientras todos dormían, nadie puede negar que su obra marcó al rock nacional.
Su muerte me hizo pensar en este poema de Mario Benedetti.
Cuando eramos chicos los viejos
tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana
no existía.

cuando muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque era un océano
la muerte solamente una palabra.

ya cuando nos casamos
los ancianos estaban en cincuenta
un lago era un océano
la muerte era la muerte
de los otros

ahora veterano
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es por fin el océano
pero la muerte empieza a ser
la nuestra

Mario Benedetti - Inventario I

2 comentarios:

Anónimo dijo...

oy todas las guitarras están de luto
La mía, que tendría que haberse puesto a repasar zambas
sólo puede pensar en la tuya,
tal vez porque el barro
tal vez porque este balcón donde te vi
casi por última vez
mira una nube de la forma y el color
de esas eléctricas con las que soñábamos de chicos
Este balcón que se quedó esperando una charla
unas palabras o un abrazo
más
que yá no llegará
Luto también en las palabras
habituadas como estaban a que les pusieras
cascabeles
guirnaldas asonantes
o ruedas de tren apocalíptico
caleidoscópicos ojos de fertil papel
de tu prolífica pluma
que suma y resta sílabas
del metro patrón de las esferas
apenas solas
a solas penas
Adiós
que sea A-Dios
a sus brazos
a ese rincón de magia
que seguramente Él guardará
para los que se animan a jugar
con los bloques con los que ha construido el mundo
haciendo pequeños nuevos mundos de cuatro minutos
donde el corazón se muestra
y baila desafiando al vacio
Adiós
Mientras me duele el pecho
te imagino en viaje
por inmensidades más vastas que las del Capitán
pero a diferencia de él
sé que tendrás todos los tangos silbados al oído
y nunca faltará un mate
ni perfume a malvones
En todos nosotros se queda un pedacito tuyo
serás inspiración multiplicada por millares
a lo largo de los años
y lo ancho de las geografías
Cambiaste nuestras vidas
abriendole camino a la imaginación
cantándole salvaje o dulcemente
a los misterios que nos habitan
al misterio que somos
Adiós
No me resigno a tener que decirlo
Adiós
mensajero del infinito

Pedro Aznar

Anónimo dijo...

Me gusta tu sinceridad.Hoy "todos" son amigos del "flaco".

Juan Carlos